que tengo media hora
y aplica en mi la fuerza que te queda.
La prisa no es muy buena consejera
pero apúrate, por Dios, no pierdas comba.
Tengo un montón de cosas que me esperan
y no puedo dejarlas demoradas
tus labios me suplican que los bese
así que apúrate, amor, que el tiempo es oro.
Tus ojos no me dejan mucho tiempo
lamer tu cuerpo entero ya es una prioridad
decirte que te quiero me traspasa
todo mi tiempo rueda sin parar
en darte cada día un nuevo impulso
en regalarte gracia y mi humedad..
Así que no te frenes
que un minuto sin mirarte a los ojos se me acaba
goza y acúnate como una bestia
que el tiempo ya se acaba
y el abrazo me espera
y tocarte de lado
y lamerte yo sólo
apúrate mi amor
quiero darme la vuelta.
Del Blog Cuando nadie me ve
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