Salud, silencio
hasta no ser una parte del todo.
La única herencia
posible
es la misión de una lejanía
que se quiere destruir.
Sí. Se oye ahogarse el susurro,
la obligación a tientas
de la luz, del lugar
donde es cierto que se aclara el cielo.
Ahora empieza a amanecer.
Antonio Méndez Rubio
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