Heridas
Las palabras producen heridas
parecidas a la rajadura del mármol.
Son frías a los ojos,
pero dejan el corazón deshabitado,
las manos quietas
y la interrogación
interrogando
incesante
lapidaria,
trepanando los sesos.
Lamento
Cuando el alma se desnivela
rugen todos los leones.
El bosque se pone umbrío
un alarido sospechoso
recuerda: el costado
el filo
la rajadura.
El motivo del lamento
del pájaro más hermoso.
Graciela Wencelblat Wainbuch
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tus palabras son bien recibidas, ¡gracias!